-Autor: Agatha Christie-Título original: Murder on the Orient Express-Editorial: RBA-Páginas: 240-ISBN: 9788498678901
En un lugar aislado de la antigua Yugoslavia, en plena madrugada, una fuerte tormenta de nieve obstaculiza la línea férrea por donde circula el Orient Express. Procedente de la exótica Estambul, en él viaja el detective Hércules Poirot, que repentinamente se topa con uno de los casos más desconcertantes de su carrera: en el compartimiento vecino ha sido asesinado Samuel E. Ratchett mientras dormía, pese a que ningún indicio trasluce un móvil concreto. Poirot aprovechará la situación para indagar entre los ocupantes del vagón, que a todas luces deberían ser los únicos posibles autores del crimen. Una víctima, doce sospechosos y una mente privilegiada en busca de la verdad: Agatha Christie construye con esta novela una intrigante historia de suspense que desencadena en una resolución magistral.
Hércules Poirot se vuelve a ver intrincado en un misterioro asesinato, y resolverlo es uno de los dilemas más complicados con los que se ha enfrentado en toda su carrera por diversos motivos, entre los que se encuentran el hecho de que el asesinato se haya producido en un tren y que todos los posibles sospechosos tengan coartadas perfectas para no poder involucrarse en él.
Esta es, si no me equivoco, la quinta novela que leo de Agatha Christie y una de las más conocidas de la autora. Asesinato en el Orient Express se presenta con una premisa realmente interesante. Qué voy a decir yo, que me encantan las historias que suceden en un único escenario. Esta vez el asesinato se produce nada más y nada menos que en el vagón de un tren que viaja de Estambul a Inglaterra. Los pasajeros que se hallan en él se corresponden con una numerosa cantidad de nacionalidades, entre ellos el belga Hércules Poirot, el archiconocido detective de las novelas de Agatha Christie.
Si hay algo que caracteriza los casos de Poirot es que éste actúa muy al estilo de Sherlock Holmes. La autora, por supuesto, hace que acompañemos al detective en todas sus pesquisas y nos muestra las mismas pistas que él mismo va descubriendo, pero el caso se resuelve como una suerte de milagro, imposible de deducir por uno mismo. Eso es lo que a mí me desespera, el saber que por mucho que tú te comas el tarro no vas a poder dar con la solución porque te falta información que solo Poirot conoce.
En este libro ha sido más de lo mismo, aunque reconozco que todo estaba muy bien hilado y que la novela tiene una fama merecida por tal motivo. Me ha gustado el hecho de que, a pesar de haber doce sospechosos, no había pérdida a la hora de ubicarse en la lectura y todos tenían su propio peso para diferenciarse bien entre ellos. He disfrutado de sus personalidades y me he entretenido leyendo sus declaraciones y haciendo conjeturas. Sin embargo, la escritura, tan concisa, directa y desprovista de florituras me ha resultado sosa. Con la cantidad de jugo que se le podría haber sacado a la descripción del caso y a sus protagonistas, apenas he paladeado una prosa que se limitada a describir sin más. Reconozco no recordar cómo era la escritura en las otras novelas que he leído de Agatha Christie; en Asesinato en el Orient Express la he visto escasa.
Pese a que me he desilusionado un poquito con este libro después de haber leído críticas muy buenas y escuchado cosas maravillosas sobre él, creo que es una novela muy entretenida y que cumple con su cometido, que es mantenerte enganchado hasta la última página para descubrir quién es el asesino. Si no habéis léido nada de esta autora os recomendaría otros libros como Diez negritos o Muerte en el Nilo, pero para los que ya estéis adentrados en sus historias y no habéis probado Asesinato en el Orient Express, os recomiendo que lo leáis pero con las expectativas justas.
Si hay algo que caracteriza los casos de Poirot es que éste actúa muy al estilo de Sherlock Holmes. La autora, por supuesto, hace que acompañemos al detective en todas sus pesquisas y nos muestra las mismas pistas que él mismo va descubriendo, pero el caso se resuelve como una suerte de milagro, imposible de deducir por uno mismo. Eso es lo que a mí me desespera, el saber que por mucho que tú te comas el tarro no vas a poder dar con la solución porque te falta información que solo Poirot conoce.
En este libro ha sido más de lo mismo, aunque reconozco que todo estaba muy bien hilado y que la novela tiene una fama merecida por tal motivo. Me ha gustado el hecho de que, a pesar de haber doce sospechosos, no había pérdida a la hora de ubicarse en la lectura y todos tenían su propio peso para diferenciarse bien entre ellos. He disfrutado de sus personalidades y me he entretenido leyendo sus declaraciones y haciendo conjeturas. Sin embargo, la escritura, tan concisa, directa y desprovista de florituras me ha resultado sosa. Con la cantidad de jugo que se le podría haber sacado a la descripción del caso y a sus protagonistas, apenas he paladeado una prosa que se limitada a describir sin más. Reconozco no recordar cómo era la escritura en las otras novelas que he leído de Agatha Christie; en Asesinato en el Orient Express la he visto escasa.
Pese a que me he desilusionado un poquito con este libro después de haber leído críticas muy buenas y escuchado cosas maravillosas sobre él, creo que es una novela muy entretenida y que cumple con su cometido, que es mantenerte enganchado hasta la última página para descubrir quién es el asesino. Si no habéis léido nada de esta autora os recomendaría otros libros como Diez negritos o Muerte en el Nilo, pero para los que ya estéis adentrados en sus historias y no habéis probado Asesinato en el Orient Express, os recomiendo que lo leáis pero con las expectativas justas.
2 idea(s) :
A mi me parecio una gran obra y con ella conoci a la autora
Me lo compré hace unas semanas, aún no le he leído, pero le tengo muchísimas ganas. Espero que no me decepcione. Un beso.
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