New York Shitty, Germán Sánchez Espeso

Autor: Germán Sánchez Espeso


Título original: New York Shitty


Editorial: Debols!llo


Páginas: 405

Sinopsis:

¿Qué tiene que ver el multimillonario Melvin Greenberg, dueño de una cadena de ópticas, con Nick Clippers, propietario de West of Ede, una tienda de animales exóticos? ¿Por qué Isolde, la mujer de Melvin, considera indispensable, para llenar su vacía existencia, la <> de un gorila? ¿Y los gemelos Berridge, asesinos en serie, y su extraña afición a las culebras acuáticas? Estas son algunas de las preguntas que el escaso cerebro del corrupto capitán Bill Stewart, de la Brigada Especial Antivicio, se hace a lo largo de esta corrosiva y lúcida novela de humor, escrita con un ritmo trepidante que nos arrastra desde las más lujosas mansiones de East Hampton hasta los fondos más bajos neoyorquinos a través de un <> amor por los animales.

Nick Clippers es el propietario de la tienda de animales exóticos de la calle 38 Oeste de Nueva York; Joycelyn O'Murphy, aspirante a actriz, es la amante de Nick; Joycelyn es espiada por el detective Matt Pinkowski, antiguo trabajador de uno de los laboratorios de Ópticas Greenberg, que es contratado por Bob, el novio de Joycelyn; Melvin Greenberg, conocido como el Rey de las Lentillas, es un famoso multimillonario casado con Isolde, que a su vez desea un gorila para, según ella, 'acercase a la naturaleza'. Para ello acude a la tienda de animales de Nick. Pero lo que no sabe es que en realidad el propietario de la tienda es un gangster que pretende introducir droga a través utilizando la llegada del gorila a Nueva York; esta trama es investigada por el jefe de la Brigada Especial Antivicio, Bill Stewart; a su cargo está Cyrus Muscatella, encargado de vigilar a Joycelyn, por el tema de unos peces que la madre de la señorita O'Murphy, Agnes, compró sin saber que llevaban en su interior sustancias estupefacientes; la señora O'Murphy suele cruzarse con el coche del presidente Marshall, personaje al que odia profundamente; el presidente Marshall tiene a su cargo al fiscal Krich; Krich se ocupó del caso de los gemelos Berridge en un juicio; los gemelos Berridge trabajan para Nick, al igual que Slaughter; Slaughter es enviado por Nick para seguir a Joycelyn; en el piso contiguo al de Joycelyn, vive Sherry con su hijo de cinco años Philibert, y todos los días tienen que aguantar los amoríos de su vecina.

Si has conseguido leer todo este embrollo, enhorabuena.

Ni yo misma me he aclarado para escribir este pequeño resumen de la novela. Aun así, esto no acaba aquí. Quisiera poder deciros algo más sobre la trama, pero eso me llevaría bastante tiempo, porque intentar contar todo el libro supondría escribir la historia de cada personaje por separado; sin embargo los personajes se deben tomar en conjunto con los otros, porque si no, el libro no cobra sentido alguno. Así que empiezo con la opinión de la novela.

El libro se lleva los cinco cebollos porque se lo merece, en todos los sentidos. Para empezar nunca había leído nada igual: diferentes historias que se entrecruzan entre ellas para terminar en un mismo punto. Sé que no es una idea original, pero para mí sí lo ha sido. Hasta el más insignificante de los personajes que se nombra, aparece más adelante con un dato que lo une a otro personaje, y que hace que todos sean indispensables. Aunque arriba os he puesto una buena cantidad de nombres, faltan muchos más, pero esos son los principales.

Personajes, personajes... Cada uno tiene una personalidad característica a cual más diferente y todas perfectamente elaboradas, con sus problemas personales y sus ambiciones que nos permiten encasillar sus acciones a primera vista. Es genial la manera en que se definen: Nick, calculador hombre de negocios; Slaughter, el grandote y tontorrón trabajador del primero; Joycelyn, la ninfómana; Cyrus, el polocía patoso; los hermanos Berridge, gemelos con una mente más que pervertida... y así todos uno por uno.

Este libro no es para nada juvenil, y lo digo porque tiene escenas de sexo bastante explícitas (con las que me he reído a más no poder), y trata temas con los que más de uno se asombraría, y que ya he nombrado (drogas, sexo, violaciones). Y sin embargo, está todo tan impregnado de esa chispa tan divertida, que no he podido evitar tomármelo al más puro estilo humor negro.

Porque esa es la intención del autor: que nos riamos de las rocambolescas experiencias que sufren los personajes, que nos alarmemos con algunas escenas, que repugnemos otras cuantas (hay varias que mejor no citarlas, revolverían el estómago de más de uno), y que disfrutemos el libro desde el principio hasta el final.

A parte de todo lo superficial que pueda parecer a primera vista, la novela tiene un trasfondo social bastante marcado: están los que viven en la miseria, los que salen adelante de aquella manera, y los que pueden permitirse hacerse una hoguera con billetes de los grandes. Nueva York, tan idolatrada por muchos, se nos muestra sucia, corrupta y para nada elegante. El ritmo de la lectura es ligero, las hojas se pasan sin uno darse cuenta, mientras la historia se sigue retorciendo hasta al punto de no saber por donde va a salir. 

Tenía ganas de leer algo diferente, principalmente que no tuviese a una chica joven como protagonista ni una trama que girase en torno a líos amorosos, criaturas fantásticas... y me he topado con esta delicia. Ningún momento del libro es imposible de creer, y doy gracias a ello. Además que el autor es español, así que más a su favor.

Leedlo si tenéis la oportunidad, será como un descanso gratificante entre libro y libro.

Veredicto:

Exageradamente creativo.

Nota:

Páginas:

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